Volvía yo esta tarde de la oficina, cuando de repente decidí cruzar la calle. Y justo en ese mismísimo instante en el que me estoy cambiando de acera, aparece por la primera de ellas una chica muy agradable a la vista (que estaba buenísima vamos).
Me pregunto si no será una señal para que no me haga definitivamente gay...ains, cosas de la vida.
Jajajajaja, sabes que lo de ser gay no es lo tuyo para nada...
ResponderEliminarAsí que menos cambios de acera!