viernes, 30 de mayo de 2014

Anextásiame la vida

Sé el bisturí de corte
para el patrón de mis ilusiones
La mesa de quirófano donde perder
la vida
y el miedo a la muerte.
Sé la medicina
antibiótico de decepciones
Mi droga favorita
destructora de mente.
Sé la aspirina que calme
mis dolores de mí
y de mi suerte.
Sé sin receta médica
que te encuentre sólo en el mercado negro
o entre mis dedos.
Sé una operación
salida
sin retorno
ni anestesia.
Sé el beso soporífero de buenos sueños
cada mañana
que me anestesie los miedos.
que me anestesie
                            los
                                  tiem
                                         pos
                                                   que me (an)extasian los labios.

Sé tú el punto de inflexión
y de sutura
que una mis noches
con mis días.

jueves, 29 de mayo de 2014

cob|doc (II)

Soy satélite planetario
antaño visitado
por humanoides
y lucernarios.
De doble faz es mi cara
de doble haz son mis luces.

Mírame,
míranos,
no hay uno,
sino dos.

Está el que vuela
el que siente
el que,
siendo sinceros,
(casi) nunca miente.

Y está el que amarra
y no suelta
el que miente
más que ama
el que planta
en tierra muerta.

Uno libre,
o al menos eso cree,
vive atado sólo a disposicines
de quehaceres societarios
y menesteres realmente
innecesarios.

El otro libre,
de veras,
vive atado a las palabras,
las que lo nombran
y renombran,
y las que marcan su ausencia
de un rojo
entre carmín y sangre.

Tiene al primero disposición de él
y le importa tres pitos que llueva o truene en cielos ajenos,
que si las palabras lo llaman,
o no
él aparece para hacer suyo
lo que suyo es,
y lo que no también.

Uno es puro instinto
razonamiento ilógico
de miras cortas.
El arte del importunismo
la caradura y el cinismo.


El otro es...
El otro es simplemente
distinto.

lunes, 26 de mayo de 2014

Odio los domingos

Culpa de los suspiros
o expiros
que me afrontan
me confrontan
con una realidad
de sueño
de pesadilla más bien
pero real,
al fin y al cabo
 
son estos finales
que me cuestionan
y me hacen cuestionar
de plenitudes
sentidos, sin sentidos
y los sinsentidos
de este sino.

Que sí,
que sé lo que me digo
que si por ellos no fueran
la vida tendría menos sentido,
tal vez,
pero tampoco se le buscaría
con ese ímpetu 
de cazafortunas
redomado.

Que sí,
que sé lo que me digo,
la felicidad desbordante
abundante
y cantante
sin preocupaciones de estar en busca y captura
disfrutando de compañías en su propia conjetura.

La calle su hábitat
con morada
en las sonrisas.

y todo esto junto
todo esto
en conjunto
cuestionan sin
interrogantes
diatribas divagantes.
 
Me pregunto,
y yo mismo me respondo
si tendrían sentido
las semanas sin domingo.

Sí,
tendrían sentido las semanas sin domingo.

miércoles, 21 de mayo de 2014

Impunity

"
impunidad.
(Del lat. impunĭtas, -ātis).
1. f. Falta de castigo.
 "

La impunidad en la red es noticia en este País.
La impunidad de comentarios más,
o menos,
desafortunados
resulta ser más importante que cualquier nuevo caso de corrupción.

La impunidad del que se alegra de una muerte,
una muerte por asesinato,
que no justifico pero...
digamos que la justicia tiene sus trucos.

El karma y esas mierdas.

Quizás haya que hacer memoria
y recordar que
la impunidad no es de un anónimo
la impunidad no es de un internauta común
la impunidad es del que miente sin castigo
la impunidad es del que desatiende consejos
y echa a arder un bosque entero
sólo para celebrar las patronales
con un bonito espectáculo pirotécnic
la impunidad está en aforarse para escapar de imputaciones
la impunidad está valorada en miles de millones de euros perdidos en falsos ERE
la impunidad se reparte en sobres de logotipo azul
la impunidad está vetada para jueces tocanarices metomentodo
la impunidad genera intereses del 7% los 3 primeros años, y al cuarto te desahucia
la impunidad no está en twitter, señores,
ni en facebook,
ni en cualquier foro en el que desgarrarnos las vestiduras,
cansados del dolor,
del sufrimiento,
de sentirnos estafados
la impunidad está en las manos de los que nos gobiernan, de una forma u otra
la impunidad es la que nosotros les servimos en bandeja cada 4 años

Que no se nos olvide.

lunes, 19 de mayo de 2014

Auto(de)defunción

El autoengaño en la punta de un lápiz.
La autocompasión de un pintalabios.
El auto de defunción de una ilusión
se traza con estos dos colores
y se firma con sangre.

miércoles, 14 de mayo de 2014

Un alfabeto
por canción
nos mata las tintas
del cuerpo.

Las letras se mecen
en la cuna que muestran
tus pestañas,
y no queda aliento
ni aire
que insufle
a los besos
los versos
aviesos
de eso
de la vida que me quitas
en cada estrofa.

He visto
noches saltar de alegría
por el danzar de tus pétalos
en la letanía
y un amanecer
de esquirlas
en tu marcha.
O quizás por ella.

No sé qué les haces
a las letras
ni a los números,
que queman,
perduran,
y embrutecen
las palabras que brotan
del rencor.

Por ello en este suspiro
de pensamientos
empapelados
no caben más astros
ni lunas
a los que rezar.
Y sé
que en tu misa
mi cuerpo
ya no encuentra redentor.

lunes, 12 de mayo de 2014

Encuentros gramaticales

Andaba él por una calle normal,
un día normal de un mes normal cualquiera.
No sé, pongamos que agosto.
Sus pasos apresurados marcaban un encuentro ineludible.
Los dos desconocidos,
los dos enaltecidos por un radiante sol.
Se cruzaron,
como era de esperar,
de frente,
y juntos se miraron:

- ¿Eres tú?
- Solo si tú quieres que sea.

y fueron
y desde ese día son
y serán
tiempo verbal,
predicado nominal
y sujeto.

Muy bonito, sí,
pero si todo fuese así,
de fácil,
no existiría la poesía,
o sería una mierda*.
*(como podréis ver)

jueves, 8 de mayo de 2014

Firefly

Y cuando descargo mi ser, 
se me llenan
las pupilas
de sangre
y vislumbro
insectos de luz
vagando a mi alrededor.
Su aleteo dura lo
que los capilares
en vaciarse
a ritmo
de pulso sanguíneo.
Si quiero,
con sólo cerrar mis párpados,
me deshago de su brillante existencia
hasta que otra luz
los subyace.
Son efímeros,
débiles cual
amor de verano.
Pero son míos,
y sólo yo los veo,
y sólo yo los quiero.

miércoles, 7 de mayo de 2014

Starving out of love

Era incapaz de alimentarse solo, necesitaba de otra mano que le alimentase primero, para después hacerlo él.

La indecisión entre cuchara y tenedor traía frío a su comida Hasta que la tiraba por congelación.

Nunca supo decidir entre manjares. Todo plato le daba hambre, y aún así, moría cada noche de inanición.

Muestra intachable de tristeza que en pleno uso de sus facultades para comer necesitase de otra mano compañera.

Su vida continuaba como si nada hasta comprender que por sí solo no es que no comiera por sí solo es que no amaba.

martes, 6 de mayo de 2014

Shipwrecked Circus

Han caído lonas y carpas
como caían los trapecistas en la red
tras un arriesgado
y fallido intento de alcanzar,
entre malabar y malabar,
la cúpula de un circo que ya no es mundial.
Se han apagado
rugidos y barritos
palmadas y chillidos.
No hay tartas ni coloretes.
No hay arlequines corriendo en patinete.
Y esas coloradas narices
ni son de goma,
ni son felices.
Terminó el ultimo show
y con el espectáculo se acabaron
domadores y mundos de color.
No se cambian llantos por risa
ni existen ya sonrisas y lágrimas.
El humor era rasgo de inteligencia en el recinto.
Y a este payaso cada vez le queda menos gracia.

lunes, 5 de mayo de 2014

Contradicciones

Qué triste, ¿no? Contentarte, y no poco, con lo que antes renunciabas a siquiera aceptar.
Qué nivel de decrepitud te corroe cuando ves que la meta se aleja por mucho que corras en su dirección. Quizás sea mía la culpa, y esté confundiendo de nuevo dirección con sentido.
Sentido... ¿qué sentido tiene la vida sino el contrario?
¿Qué sentido tiene la muerte sino pasar antes por el contrario?
Un sentido, y otro, y otro más, el de la vista, del gusto. Sentido del tacto, del olfato y del oído. Sentidos aunados y unidos en mostrarte la realidad. Su realidad. La que ellos perciben, la que tú percibes, pudiendo diferir de la auténtica a veces.
A veces, y a voces, hablaría con el viento en contra, que me traiga la voz de nuevo a mí, que me cuente lo que le grito, lo que le pido, para no caer en la locura de hablar con uno mismo sin intermediario ajeno alguno.
Y no lo hago, no. Y me importa no hacerlo, al igual que no me importaría hacerlo. No es miedo, es algo peor. Es miedo a tenerlo. El miedo, digo. Miedo a cambiar ser por estar. A dejar de ser y estar donde estoy, donde soy, por una nueva nube en la que volar. Un nuevo cielo desde el que saltar.
El miedo atemoriza a los valientes en la medida que los cobardes dejan de sentirlo por sentir. Y sin riesgo ni caución se intercambian papeles de un guión premeditado.
No sé, quizás me queje por quejarme. Por aparentar una meta superior a la que de momento he alcanzado. A lo mejor, o peor, sólo sea un niñato malcriado por la necesidad de tener, de querer, de ser y desear. Puede que incluso hable por hablar, como el que oye pero no escucha, ¿me explico? La multitud habla, y habla, y tú haces como que sí, que qué guay tu fin de semana en la sierra, pero... ¿qué ha sido eso? Y le prestas más atención al repicar de tacones en la esquina que a lo bonito que era poder ver las estrellas tirado en la tierra. Pues a mí me pasa igual, pero conmigo mismo. Me oigo quejarme de mi zona de confort, pero estoy tan agustito en ella que para qué echar cuentas, para qué echar a volar.
No sé, qué fácil es decir qué mierda es todo cuando no se duerme en el suelo.