Indignación pública

Bueno, aquí tenéis la versión extendida de la pataleta que he soltado en Twitter antes.

Recientemente, mi empresa ha logrado la contratación de unos servicios de mantenimiento con una empresa pública. De momento, he tenido contacto con 3 personas del departamento de compras, 1 persona de Compras-Departamento Jurídico, 2 de mantenimiento y 2 más de administración y cuentas. Además de los distintos jefes de mantenimiento de cada centro.
Pese a tanto cargo público encargado de sus tareas, soy yo el que tiene que llevar a cabo mil trámites para cualquier tontería. Papeleo por aquí, papeleo por allí. Documentación perfectamente detalladita para que ellos no tengan que rectificar nada. Informes técnicos, económicos y de lo que se les ocurra.
Total, que ellos son entre 8-10 personas.
Y yo uno.
Trabajando en conjunto con los 8-10.

Bueno, y también hay un portal web para la subida de documentación (deja mucho que desear, puesto que no me funciona bien) que se encarga de avisarme de que los documentos están caducados automáticamente, para que los suba de nuevo. No ellos.
Total, 8-10 puestos públicos vs. 1 puesto "privado".
Y os aseguro que el coste de cualquiera de esos puestos públicos puede suponer el doble (o más) que el mío.

Esto, seguramente, sea extrapolable a todas y cada una de las empresas/administraciones públicas. Teniendo unos 2-3 puestos/cargos que puedan condensarse en uno sólo.

"¡¡Cabrón!! ¡¡Estás fomentando el desempleo!!"
No necesariamente, mi idea no es echar a la calle a 2 para que un tercero se encuentre explotado. Lo que quiero transmitir es la necesidad de repartir mejor las competencias, y los puestos. Hay mil administraciones, departamentos, o lo que sea, que son terriblemente lentas, con tiempos de espera irrisorios. Una mejor organización y reparto de competencias, evitando tanto duplicidades como explotaciones, nos ahorraría mucho tiempo y dinero.
Os recuerdo que estos cargos públicos los pagamos nosotros. Con las subidas de impuestos y con los recortes que estamos sufriendo, qué menos que esperar algo de eficacia y eficiencia.